Nuestra angustia, que es leve y pasajera, nos prepara una edén eterna, que supera toda medida. Porque no tenemos puesta la inspección en las cosas visibles, sino en las invisibles: lo que se ve es transitorio, lo que no se ve es infinito. Su sufrimiento nos muestra que el https://relaciones-de-pareja05936.csublogs.com/38723964/reflexiones-bíblicas-motivadoras-no-hay-más-de-un-misterio