Zidane se movía con la armonía de un solo ser con el balón. Con deslumbrante maestría y elegancia innata, él orquestaba el juego con fuego interior. Sus pases eran una obra de arte, como pinceladas magistrales en https://idamxvt020223.acidblog.net/69541316/qué-originó-la-reacción-de-zidane